Principal

Diario YA


 

Personalización de las prendas con etiquetas

Los crecimientos de la venta de ropa experimentan cotas globales nunca antes vistas. Cualquier persona de cualquier parte del mundo puede adquirir una prenda y que le sea transportada a su casa en pocos días. Es algo sorprendente. Los consumidores no buscan solo prendas de marca, buscan ropa con la que vestirse a su gusto y con la que proyectan una imagen personal que se adapta a su idea sobre sí mismos.

La ropa hace que nosotros nos identifiquemos con nosotros mismos y nos ayuda en nuestro proceso de identidad, a veces compartida con otros grupos de personas o con la familia o amigos. Es por eso que la ropa es tan importante para la gente.

La compra de ropa se ha convertido en una actividad trivializada que obliga a que renovemos nuestro armario varias veces al año. Se ha convertido en un hábito normalizado. Para que una persona compre hoy ropa no hace falta que se le haya roto una prenda. Hoy se sabe que el sector de la ropa y la moda en España tiene una mayor penetración entre las mujeres que en los hombres y entre los estudiantes que entre los empleados por cuenta ajena, y que a mayor nivel de formación, más compra online. Durante 2019 más de 11 millones de personas compraron algún artículo deportivo o prenda de ropa por internet, y habrá que esperar al cierre de 2020 para comprobar la evolución del sector, que ha crecido de manera exponencial en los últimos 25 años.

Los consumidores seleccionan las prendas muy de acuerdo con sus gustos y estilos, cada vez más personales, y poco seguidores de las líneas generales que se marcan por las tendencias de la moda. Hoy puede vestirse con ropa nueva como si fuera usada, y al revés, ropa usada como si fuera nueva, mezclando estilos y tendencias, incluyendo las de modas o temporadas pasadas.

Es por ello que los consumidores buscan prendas y ropa en los lugares más insospechados, incluyendo pequeños comercios donde encuentran justo aquella prenda que le gusta o le conjuga bien con su ropero. Los roperos se han vuelto personalísimos, y hay gente que tiene un fondo de armario de ropa muy semejante con la que no varía su estilo y es capaz de complementar unas prendas con otras a su gusto o de acuerdo con la temporada del año en que vive.

Los comercios y tiendas de ropa tienen que innovar y adaptarse a estos nuevos gustos, pudiendo optar por dos estrategias comerciales: o se enfocan a un determinado tipo de público, especializándose en ese segmento, o bien optan por ofrecer prendas heterogéneas y variadas que puedan ser útiles a un variado número de clientes, intentando abarcar los diferentes estilos y tendencias más actuales. Los estilos suelen cambiar con el paso del tiempo, pero hoy en día la moda es bastante flexible e incluso los creadores de moda se han ido adaptando a los gustos heterogéneos de los potenciales compradores.  

Para marcar nuestro propio territorio conveniente que nuestro establecimiento o tienda de ropa y complementos tenga su personalidad propia, algo que puede conseguirse fácilmente con el etiquetado ropa. Las tendencias actuales hacen que el público se fije en una determinada tienda o marca de ropa por el estilo o diseño del establecimiento, no solo por la marca o la prenda: por la decoración, la idea que conlleva acerca de la ropa que allí se puede comprar, el diseño de la prenda y otras cuestiones más sutiles como la marca o el etiquetado. Un establecimiento de prendas de vestir y complementos debe tener un nombre, una imagen gráfica propia y un escaparatismo cuidado, pudiendo aprenderse mucho en los cursos que organiza la Cámara de Comercio. Pero de un tiempo a ésta parte los clientes tienen en cuenta otros pequeños detalles, a parte del trato personal y la atención, o las políticas de devolución o retoques de prendas.

La política comercial de etiquetar la ropa que tenemos en venta nos accede, a la vista del cliente, a otro nivel comercial. Es nuestra propia imagen de marca. Y existen además muchos tipos de etiquetas de ropa que sean exclusivamente nuestras, como las etiquetas tejidas, las etiquetas colgantes, las etiquetas que muestran las diferentes tallas y que también podemos personalizar y las etiquetas de cuidado de la ropa, con las indicaciones acerca del lavado o planchado  los materiales con los que está confeccionada.